martes, septiembre 27, 2005

Marejadilla en el alma

Allá resuenan tambores

tamboriles y guitarras,

allá se visten de fiesta

con zafiros y girnaldas

los sentires y pesares

enlazados al compás

de deseos huracanados

como marejada en mar.
Pasión ¡compadecete!

que no quiero despertar

en el desierto infinito

de un amor cuando se va.

Revuelo de atardeceres

susurros de viento y mar

los amantes acunados

cantan un mismo cantar.

Que no se duerma la Noche,

Que no se despierte el Sol,

Que se acalle la Conciencia,

Que solo vivir de Amor...

es vivir sin Apariencia

y es vivir: de Corazón.

Arcoiris.